Antecedentes

Jose Ángel Arregui, cérigo de San Viator (csv) es detenido en Chile en agosto del año 2009 por posesión y distribución de pornografía infantil.
Meses más tarde, cuando la investigación demuestra que en las grabaciones aparece el propio religioso de San Viator, se pone en marcha la búsqueda de alumnos que aparecen en las grabaciones de Arregui. Llegó a tener en su poder más de 400 horas de contenido pedófilo.
Aquí es cuando entro yo en la historia. Exactamente, un 27 de enero de 2010. Un frío día por la tarde, sobre las  19:30 recibo la visita en mi domicilio de dos guardias civiles. Tras identificarse y preguntarme si conozco a Jose Ángel Arregui, les invito a pasar. Así, en frío, sin esperarse semejante bombazo a la línea de flotación de la memoria, comienzan a relatarme su investigación. Me preguntan si recuerdo algo de lo ocurrido. Por supuesto que lo recuerdo, han pasado 18 años pero lo recuerdo como si fuera ayer. Una puerta cerrada en mi memoria esa abierta de par en par. Les relato todo. Acto seguido me enseñan unas fotografías en las que yo aparezco. Me informan de que el religioso de San Viator grababa todas sus fechorías. Y que gracias a eso, y a que las distribuía por Internet, consiguieron detenerle. Gracias a eso consiguieron detenerle, pero a costa de cargarnos a las víctimas con una pesada mochila. Con el sufrimiento añadido de saber que no solo abusaron de ti, sino que además lo grababa y lo distribuía.
Inmoral, ilegal, nunca justificable.

¿Qué hicieron los clérigos de San Viator desde que supieron de la detención en Agosto de 2009 de su religioso?
¿Nada? No, peor que nada. Le pagaron un abogado en Chile, además uno de los más caros, y trataron de hacer el menor ruido mediático posible. Intentaron que no se descubriera sus fechorías, que nadie se enterara. Que escampara la tormenta y hacer como si nada hubiera ocurrido.
Pero a veces la verdad consigue abrirse camino a pesar de las barreras que colocan los poderosos para ocultarla. Y eso ocurrió el 16 de Marzo de 2010. 9 meses después de conocer la detención de su religioso, y por la publicación del escándalo en toda la prensa española, e incluso internacional.
Días después, el 20 de Marzo, la congregación difundió este insultante comunicado oficial.
Otra vez más: Inmoral, ilegal, nunca justificable.
Petición de perdón diréis.
No. Se colocan el cartel de víctimas.
¿Alguien con una pizca de moral y ética puede hablar de "lesión a la reputación de nuestros centros y de quienes en ellos trabajan, a la Congregación y a la propia Iglesia."?
¿Y de las lesiones provocadas por vuestro silencio e inacción durante tantos años?
¿Cuanto daño y sufrimiento podríais haber evitado si hubierais actuado diligentemente cuando conocisteis de los problemas de Arregui?
Y además este bochornoso comunicado ha desaparecido de su página web, imposible encontrarlo, ha sido borrado siguiendo su patrón habitual, ocultar cualquier indicio de responsabilidad y querer seguir con su imagen artificial de limpieza.
Sólo imagen, vuestra actitud y vuestro interior es putrefacto, está podrido, hiede.